Desde finales de diciembre, una cadena de sismos ha estado sacudiendo a Puerto Rico. El desastre natural de un terremoto ha puesto a la Isla en estado de emergencia, y por eso es muy importante permanecer atento y saber cómo protegerse.

Si empieza a temblar, si usted física y mentalmente puede, agáchese hacia el piso, cúbrase debajo de una mesa o escritorio y proteja su cabeza y cuello con los brazos. Por último, agárrese de la pata de la mesa u otro mueble hasta que pare de temblar.

Ahora, si usted no puede “agacharse, cubrirse y agarrarse”, antes de un terremoto:

  • Anote cualquier necesidad específica, limitaciones y capacidades que tenga, y cualquier medicamento que tome. Haga una copia de la lista y póngala en su bolso o cartera.
  • Encuentre a alguien (un cónyuge, compañero de cuarto, amigo, vecino, pariente o compañero de trabajo) que le ayude en caso de emergencia. Entréguele la lista. Tal vez podría proporcionar una copia de su llave de su casa, o hacerles saber dónde pueden encontrar una en caso de emergencia.

Durante un terremoto:

  • Si está confinado a una silla de ruedas, trate de pasar por debajo de una puerta o en una esquina interior, pinche las gomas y cúbrase la cabeza con los brazos. Retire cualquier cosa que no esté bien sujeto a la silla de ruedas.
  • Si puede, busque refugio bajo una mesa o escritorio resistente. Manténgase alejado de las paredes exteriores, las ventanas y los objetos colgantes.
  • Si no puede moverse de una cama o silla, protéjase de los objetos que caen cubriéndose con mantas y almohadas.
  • Si está afuera, vaya a un área abierta, lejos de los árboles, postes telefónicos y edificios, y quédese allí.

Después de un terremoto:

  • Si está atrapado, trate de atraer la atención hacia su ubicación con un pito, alarma u otra cosa que haga sonidos parecidos.
  • Encienda su televisor o radio de batería para recibir información e instrucciones de emergencia.
  • Si puede, ayude a otros que lo necesiten.

¿Cómo ayudo a los niños?

El miedo es una reacción normal ante el peligro. Un niño puede tener miedo de que se repita, de que se lesione o de que muera después de un terremoto. Puede tener miedo de ser separado de su familia o de que lo dejen solo. Los niños y niñas pueden incluso interpretar los desastres como un castigo por sus malas conductas, sean reales o imaginarias. Es menos probable que los niños experimenten miedo o ansiedad prolongados si saben qué esperar antes, durante y después de un terremoto. Por eso es muy importante hablar con los niños abiertamente para así ayudarlos a superar los miedos.

Aquí algunas sugerencias:

  • Explique que un terremoto es un evento natural y no es culpa de nadie.
  • Hable sobre sus propias experiencias con los desastres naturales o lea en voz alta libros sobre terremotos.
  • Anime a su niño a expresar sus sentimientos de temor. Escuche atentamente y muestre comprensión.
  • Su niño puede necesitar tanto la seguridad verbal como la física de que todo va a estar bien.
  • Dígale a su niño que la situación no es permanente.
  • Incluya a su hijo en las actividades de limpieza. Es reconfortante para el niño ver que la casa empieza a volver a la normalidad y que tiene un trabajo que hacer.

¿Dónde llamar en caso de emergencia?

  • Sistema de Emergencias: 9-1-1,
  • Número de orientación gubernamental: 3-1-1
  • Negociado de Policía: 787-343-2020
  • Negociado de Manejo de Emergencias:
    • Oficina central: 787-724-0124
    • San Juan: 787-294-0277
    • Vega Baja: 787-965-7770
    • Arecibo: 787-878-3454
    • Utuado: 787-814-7680
    • Humacao: 787-852-4044
    • Ceiba: 787-863-3330
  • AEE 787-289-3434
  • AAA 787-620-2482
  • Cuerpo de Bomberos 787-343-2330 
  • Emergencias Médicas 787-343-2550 / 787-754-2550
  • Línea PAS de ASSMCA 1-800-901-0023

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